Una de las formas de dar a conocer tu negocio fuera del entorno on line es el uso de la publicidad ordinaria; por lo que debemos de cuidar minuciosamente nuestra carta de presentación con artículos como tarjetas de visitas o folletos nos ayudarán a conformar una buena imagen de marca en el exterior.  Sin embargo sois muchos los que aún os preguntáis por la efectividad de las tarjetas de visitas, si están en desuso o no, o si se han convertido en algo del pasado. Otros por el contrario apuestan por ellas pero simplemente no cuidan su estética.

¿Por qué hoy día las tarjetas de visita siguen teniendo tanta importancia? pues porque no todo el mundo se ha logrado adaptar al entorno digital. En una reunión, un encuentro de negocio…, pocas serán las personas que sacarán su móvil para buscarte en Linkedin o Twitter. En cambio, cualquiera puede llevar encima una tarjeta de visita y además, aunque en Internet puedas encontrar los datos de contacto de una empresa, en una tarjeta de visita especificas los datos personales de un responsable y eso lo convierte en algo mucho más personal entre emisor y receptor, generando de esta forma confianza.  Es el instrumento perfecto para dejar tu huella en un posible cliente.

«Una tarjeta tiene que hablar de su propietario y, lo más importante, tiene que hacerlo bien«

Por tanto, para que mi tarjeta sea efectiva, ¿qué información debería incluir? Aquí os dejamos algunos consejos.

1.- Lo primero es pensar en el diseño, si no se tienen las nociones básicas mejor contratar a un profesional. Recuerda que el diseño de la tarjeta es en lo primero que tu potencial cliente se fijará. Piensa qué imagen quieres proyectar de tu empresa. Puedes optar por un diseño más práctico, minimalista… utiliza las dos caras de la tarjeta, ¡pero ojo! no la sobrecargues. Aquí lo importante es conseguir una estética profesional y sobre todo que te diferencie del resto.

2.- Sé coherente con el resto de tus comunicaciones. Es decir, mantén el mismo estilo que mostrado en el resto de elementos de comunicación: utiliza los mismos colores, tipografías, símbolos, expresiones, formas… de manera que logre identificarte y mostrar tu personalidad.

3.- ¿Cuál es el tamaño óptimo para nuestra tarjeta? ¡Menos es más! Lo ideal es un término medio, un tamaño estándar que se sitúe alrededor de los 9x5cm, pues debe de caber en billeteras y tarjeteros.

4.- Prohibidísimo imprimir las tarjetas con tu impresora casera de casa. Acude a una imprenta que te pueda proporcionar un papel de calidad que no se rompa con facilidad; los puedes encontrar de muchos tipos: lisos, rugosos, mates, con brillo, más finos, más gruesos o incluso transparentes. ¡existen un sinfín de formatos por descubrir!

5.- La información más relevante a incluir en su tarjeta son: nombre, puesto u ocupación, nombre de la compañía o negocio y logotipo, direcciones, número de teléfono, correo electrónico y sitio web. En definitiva, toda la información que recoja quién eres, qué haces y dónde contactar con usted.

6.- No olvide incluir tus redes sociales para que tus clientes puedan ampliar más información acerca de tu empresa: twitter, facebook, linkedin, etc.  Recuerda que debemos de hacer uso de las tarjetas de visita como un elemento complementario a toda la información que circula de usted o su negocio en la red. Con incluir el logotipos de estas redes sociales es suficiente.

En definitiva, tu tarjeta de visita debe transmitir de un solo vistazo la filosofía y valores de tu empresa, pues no debes olvidar que se trata de una herramienta de comunicación más que debe ser fiel a tu imagen corporativa pero que además debe llamar la atención por sí sola.

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